Ángel Alberto Yanosky Farran

Mar, 24 Jul. 2018 | 14:33
Biólogo Investigador

El Dr. Ángel Alberto Yanosky Farran es biólogo e investigador, su campo de trabajo es la conservación de la biodiversidad. Fue director de Guyra Paraguay, organización de la sociedad civil sin fines de lucro, que trabaja en la defensa y protección de la diversidad biológica de nuestro país.

Yanosky nació el 18 de octubre de 1962, en Coronel Brandsen, Argentina, y se encuentra radicado en Paraguay desde el año 1993.

En esta entrevista nos cuenta más acerca de su trabajo científico y sobre su lucha para la preservación de la biodiversidad.

¿En qué se encuentra trabajando actualmente

Actualmente soy Director de la organización Guyra Paraguay, donde también me desempeño como investigador.

¿Cuál es la cantidad de artículos publicados?

He publicado algo más de 100 artículos en diferentes revistas especializadas nacionales, regionales e internacionales. Los mismos tratan sobre naturaleza y diversidad biológica.

¿Cómo fue para iniciarse y dedicarse a la investigación?

Fue por la necesidad de informarme para tomar decisiones en áreas de conservación de la naturaleza. Me inicié con una fuerte formación en ciencia y aplicación desde los estudios en la Universidad, en un laboratorio de Ecología de Campo, y dentro de un grupo multidisciplinario de ecólogos y biólogos.

¿Qué o quién lo motivó a dedicarse a la investigación?

Me motivó bastante un equipo de investigadores especializados en vertebrados (mamíferos, aves y herpetozoos) con fuerte inclinación en dinámica del paisaje, geomorfología ambiental y fragmentación.

¿Tuvo algún mentor o tutor que haya marcado u orientado su línea de investigación más importante?

Alguien que me inspiró para seguir una línea de investigación fue el Dr. José María Chani, discípulo del Dr. Enrique Bucher. En realidad, ambos fueron mi inspiración en un acercamiento holístico a la conservación. Un “todólogo” de la naturaleza que pudiese integrar la biodiversidad en las diferentes facetas del desarrollo, con una visión global y ecoregional.

¿Cuál cree usted que ha sido el aporte  más importante que ha dado a la ciencia y al Paraguay en sus años de trabajo?

Creo que lo más importante fue darle solidez científica y técnica a las intervenciones de una ONG (Instituto privado) para incidir en las decisiones de la gente y de las políticas, en la búsqueda de un ambiente más sano, más biodiverso y que beneficie a todos por igual en nuestro país.

¿Cuáles son sus metas o sueños relacionados a la ciencia o investigación?

Sueño con la creación de un Instituto de tipo público-privado, comprometido y rico en recursos para conservar la biodiversidad del Paraguay y la región, que a su vez sea un semillero de líderes que forme, capacite y consolide capital humano en la conservación de la naturaleza, basándose en las áreas de conservación, los servicios ecosistémicos, vida silvestre y que potencie el rico acervo natural del país.

¿Qué espera de la juventud que se dedica a la ciencia y a la investigación?

Los jóvenes son quienes pueden incidir en el rumbo de la ciencia en el Paraguay. Todos mis estudiantes y colegas en los diferentes ámbitos tienen un rol clave al opinar e incidir sobre el tipo de naturaleza que estaremos disfrutando, y el rol que tienen los jóvenes en proveer de información oportuna, fidedigna, veraz y confiable para el país que queremos.

¿Qué sacrificios conlleva  hacer investigación en Paraguay?

Muchos sacrificios. Desde tener que poner la mano en el bolsillo para solventar los gastos que conlleva la investigación, hasta llevarlas a cabo sin los recursos necesarios. Sin embargo, esta condición nos hace más fuertes, más resilientes y menos vulnerables. Nos abre el cerebro y nos obliga a ser más creativos, maximizando el uso de los escasos recursos con los que contamos.

¿Le ha pasado algo curioso o anecdótico durante alguna investigación?

Mostrar las investigaciones sobre pérdida de recursos naturales y biodiversidad por diferentes lados del mundo, y ser creíble y convincente de que necesitamos apoyo para conservar muestras de los ecosistemas naturales para comprender la estructura original de este país. Personas a las que conocí a través de World Land Trust de Inglaterra, quedaron emocionadas con las investigaciones y tiempo después decidieron apostar en mis sueños, que actualmente son la Reserva Pantanal Paraguayo y la Estación Tres Gigantes.

Ellos son Lee y Luz Harper, quienes hoy viven en Nueva Zelanda y están planeando traer a su hija para conocer los frutos del apoyo que nos dieron, que sería la Reserva Pantanal Paraguayo.

El señor Kevin Cox fue el benefactor para la creación de la Estación Tres Gigantes. Yo le pregunté cómo quería que se llame la construcción donde se aloja la gente, los investigadores, los visitantes; y él me contestó “Three Giants” (Tres Gigantes) porque es el único lugar en el mundo donde se pueden encontrar los tres gigantes: el oso hormiguero, el tatú carreta y la nutria gigante. Ocurre que, en inglés, las tres especies llevan la palabra “giant” que en inglés significa “gigante”.

Yo siempre los invito a conocer Paraguay. Lo importante es difundir que necesitamos apoyo para conservar muestras de los ecosistemas naturales para comprender la estructura original de este país. 

-Un mensaje que pueda dedicar a los jóvenes interesados en seguir una carrera científica

A los jóvenes les digo que la pasión, el profesionalismo y el compromiso, son las claves para el éxito. Estar seguros de que, si no pasamos y difundimos la información científica, estaremos ocultando datos importantes y seremos co-responsables de malas decisiones que afecten nuestras vidas y las de nuestros seres queridos.